
En la Comunicación de la Comisión sobre la economía basada en la gestión de datos (data-driven economy), la Comisión Europea ha esbozado un conjunto de medidas destinadas a ayudar a las PYMES a aprovechar los Grandes Datos (Big Data) para hacerse con nuevas oportunidades comerciales.

La medicina podría librarse del monopolio de los experimentos in vitro y de la investigación biológica en tubos de ensayo. Lo última tendencia en la ciencia médica es la investigación in silico, un campo en el que los investigadores europeos acaban de lograr un éxito sin precedentes.

El futuro de la informática se cimenta en los Grandes Datos. En Internet y en la nube se encuentran colecciones ingentes de información que podrían ayudar a prevenir la siguiente crisis financiera o incluso informarle de la hora de llegada exacta del autobús que espera. Todo ello pasa por otorgar absolutamente a todo un identificador único, trátese de una persona, una empresa o un producto.

Se suele pensar que las plantas son los organismos que antes sufren las consecuencias de la contaminación y el cambio climático. Ahora, gracias a un proyecto científico del 7PM, los cultivos, los bosques e incluso las plantas de cualquier jardín podrían contribuir a combatir ambos problemas.

Los dispositivos de identificación y autenticación en Internet garantizan la seguridad de las transacciones en este medio, pero también tienen consecuencias para la privacidad. Revelar más información personal que la necesaria, por ejemplo, cuando uno se registra en la web de su banco, puede simplificar la seguridad para éste, pero va en detrimento de su intimidad. Ahora, gracias a la investigación realizada por el proyecto financiado con fondos europeos «Attribute-based Credentials for Trust» ABC4Trust , existe un método nuevo para mantener la seguridad de los sistemas y, a la vez, proteger la identidad.

Cualquier conductor siente miedo si su coche comienza de pronto a vibrar y traquetear sin razón aparente. El sentimiento no es más agradable cuando un avión comienza a temblar durante el despegue o el aterrizaje. Indagar en las causas de estas vibraciones resulta, sin duda, una buena idea. Las respuestas las podría aportar un proyecto financiado con fondos europeos dedicado a construir sistemas sensores que obtienen información acerca de las vibraciones.

Una cuarta parte de la población de adultos europeos de menos de veinticinco años no estudia, trabaja ni recibe formación. Este colectivo se encuentra con enormes dificultades para emprender su carrera profesional en la difícil situación económica actual. Los adultos jóvenes señalan que precisan de una confianza mayor en sí mismos para superar las entrevistas de trabajo, pero dada la escasez de oportunidades, las abordan con nerviosismo y sin preparación suficiente. Un proyecto financiado con fondos europeos se sirve de realidad virtual para dar con una solución.

El grafeno ha dado lugar a una explosión científica desde los experimentos pioneros realizados con este material hace menos de un decenio, ya que se cree que a largo plazo podría cobrar tanta importancia en nuestra sociedad como el acero y el plástico. Cambiará radicalmente numerosos sectores industriales y se espera que surta un efecto muy notable en la economía. El proyecto emblemático Grafeno (GRAPHENE) constituirá la avanzadilla a partir de la cual se consolidará para Europa el liderazgo científico y tecnológico en la aplicación de este material.

Hace décadas que diversos visionarios vienen prediciendo que los vehículos eléctricos (VE) «adelantarán» a los vehículos convencionales y ofrecerán a todos un medio de transporte barato, ecológico y no contaminante. Pese al incremento de las ventas de vehículos eléctricos en Europa, los dotados de motor de combustión interna siguen siendo los reyes de la carretera. Unos investigadores dotados de fondos europeos se afanan en cambiar las tornas al desarrollar una tecnología que se espera incremente notablemente la autonomía y eficiencia de los VE sin sacrificar comodidad ni seguridad.

Los relatos forman una parte esencial de la vida. Trátese de los cuentos infantiles para dormir o de un buen libro, una buena película o una buena conversación con amigos, los relatos constituyen uno de los hilos conductores de las actividades sociales, la cultura y la historia. Un equipo de investigadores financiados con fondos europeos está aprovechando el poder de una buena narración para cautivar a los visitantes de museos y ayudarles a profundizar y comprender con mayor nitidez toda clase de temas, desde historia hasta ciencia.

¿Alguna vez ha estado en un concierto de rock y, después, deseado poder vivirlo otra vez exactamente igual, o incluso mejor? Esto podría ser posible pronto gracias a un proyecto de investigación financiado con fondos europeos llamado SCENENET , cuyos responsables están desarrollando una tecnología que permite combinar vídeos captados con el móvil y remitidos por distintos espectadores situados en distintos puntos de un estadio para reconstruir el espectáculo en tres dimensiones.

¿Alguna vez quiso tener una máquina del tiempo virtual que pudiera mostrarle el aspecto de su calle en el siglo pasado? ¿O ha querido ver cómo quedaría un mueble nuevo incluso antes de comprarlo? Gracias al proyecto de investigación de la UE VENTURI, todo eso ya es posible.

Las prestaciones de los ordenadores se han multiplicado por dos cada dos años en los últimos cuatro decenios, pero se están alcanzando los límites físicos de lo que se puede conseguir con la actual tecnología de semiconductores. Los artífices de una iniciativa de la Unión Europea dedicada a la computación de alto rendimiento (HPC) aspiran a cambiar drásticamente el diseño y la construcción de los procesadores para ordenador. La consecuencia más positiva es que los ordenadores ofrecerán más prestaciones con menos consumo de energía, lo que supone una victoria para la informática y otra victoria para el medio ambiente.

El tema de la implicación del ciudadano en el ámbito político nunca ha estado tan de actualidad como ahora, a falta de unas pocas semanas para las elecciones al Parlamento Europeo. Pero si uno desea involucrarse en la política, dar a conocer ideas y participar en debates, ¿sabría por dónde empezar? Gracias a la labor realizada en el seno de varios proyectos financiados por la Unión Europea, empiezan a surgir los instrumentos y servicios necesarios para hacer realidad la participación electrónica, gracias a los cuales los ciudadanos de la Unión pueden hacerse oír de modos nuevos y más interactivos.

El Estado miembro más joven de la Unión Europea ya es un agente a tener en cuenta en la investigación que se realiza en el continente. Croacia rinde bien en investigación y desarrollo (I+D) y presenta un grado de participación relativamente elevado en los Programas Marco de investigación europeos si se tiene en cuenta su tamaño y que hasta hace poco no era miembro de la UE. De hecho, en el campo de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) ya se encuentra a la vanguardia, puesto que participa en proyectos pioneros de robótica e infraestructuras de transporte inteligentes.

El aprendizaje permanente se ha erigido en un requisito indispensable para prosperar en la actual sociedad intensiva en conocimientos. Muchos asocian esta idea a la realización de cursillos o programas de posgrado, pero ahora un equipo de investigadores europeos propone un planteamiento nuevo que demuestra que el aprendizaje puede y debe constituir una parte integrante de la vida laboral.

¿Ha visto alguna vez a un ingeniero dirigiendo a una orquesta imaginaria? Siempre imaginamos a los científicos trabajando en un laboratorio, pero Tapio Lokki, profesor de la Escuela Universitaria de Ciencias Aalto, en Finlandia, ha pasado los últimos años visitando auditorios y midiendo meticulosamente sus características. «Karaoke» significa «orquesta vacía» en japonés, y, en cierto modo, es lo que ha creado para llevar a cabo su investigación. Este estudio podría traer consigo una mejora en el diseño de edificios y generar una forma de «Realidad Aumentada» (RA) sonora.

Hoy en día es habitual reservar vuelos por Internet, realizar transacciones bancarias online y concertar citas médicas mediante un sistema virtual; así es como, poco a poco, está tomando forma el Internet de los servicios (IoS). Supone un cambio de paradigma en la manera en que se diseñan, implementan, despliegan y consumen los sistemas y las aplicaciones de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), y previsiblemente ofrecerá multitud de oportunidades, si bien también plantea retos de gran envergadura, entre ellos garantizar la seguridad y la privacidad, un aspecto que ha abordado un grupo de investigadores dotados de fondos europeos.

Las «redes eléctricas inteligentes» (smart grids) se consideran el futuro del suministro de electricidad, dado que permiten que los consumidores se conviertan en participantes interactivos de una red de distribución que se fundamenta en una generación de energía tanto centralizada como descentralizada. Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) ayudarán a los consumidores a gestionar y reducir al mínimo su gasto energético, al tiempo que los proveedores de electricidad podrán ajustar la oferta a la demanda. A través de un proyecto financiado con fondos europeos se han ideado técnicas para recabar y analizar información en tiempo real sobre el consumo y la generación de energía que será necesaria.

En la economía actual, uno de los valores más importantes para cualquier empresa es contar con trabajadores muy cualificados, productivos y eficaces. Pero para que los empleados mantengan un rendimiento máximo y aprendan nuevas destrezas se necesita de un sistema efectivo de aprendizaje permanente. Por esta razón, investigadores financiados con fondos europeos están desarrollando un método de aprendizaje potenciado por la tecnología que conjuga elementos de las teorías del aprendizaje y de los juegos serios.

Las tecnologías de apoyo (TA) han evolucionado velozmente en los últimos años, gracias a lo cual han permitido que muchas personas con discapacidades motoras disfruten en su vida de mayor independencia y comodidad. Ahora, gracias a fondos europeos, unos investigadores están trabajando en sistemas basados en TA capaces de abrir una puerta, encender una luz o conectarse a Internet con un mero parpadeo, un movimiento de la cabeza o incluso un simple pensamiento con el propósito de que sean más flexibles y adaptables a cada usuario concreto.

A medida que siga creciendo el número de servicios prestados a través de Internet, cada vez resultarán más comunes la subcontratación y otros sistemas comerciales distribuidos. Pero ¿serán igual de fiables? Investigadores financiados por la Unión Europea trabajan para sentar las bases, mediante modelos, arquitecturas y dispositivos de control, para que las relaciones comerciales en línea sean seguras y dignas de confianza. Por ejemplo, los sistemas informáticos de hospitales podrían ponerse a disposición de todos los interesados (profesionales de la enfermería, la medicina, la farmacia, así como los pacientes y sus familiares) garantizando al mismo tiempo la seguridad de toda la información delicada, sea médica o de otra índole.

Haciendo una interpretación libre del término «tecnologías de la información y la comunicación» (TIC) bien podrían hilarse asociaciones con algunos grandes logros acaecidos en otras épocas en Portugal. Por ejemplo, gracias a los avances tecnológicos protagonizados en otras épocas por este país en los ámbitos de la cartografía y la navegación, sus marinos fueron capaces de descubrir toda una nueva red de colonias para después comunicarlas (por mar). En la actualidad, los investigadores portugueses siguen estando a la vanguardia de las modernas tecnologías de redes y un buen número de otros campos punteros, desde la robótica hasta las transmisiones por radio e inalámbricas.

Desde hace mucho tiempo, la labor de archivado se ha considerado un proceso pasivo: colocar los objetos que se quiere conservar en un lugar fresco y seco y olvidarse de ellos hasta que se necesiten. Pero en la era digital, en la que fotografías, vídeos, documentos y demás contenidos se encuentran alojados en discos duros, discos externos o en servidores «en la nube», y no en cajas guardadas en un sótano, el archivado requiere un método mucho más activo. Un equipo de investigadores ha abordado esta cuestión gracias a fondos europeos.

El crecimiento rápido y exponencial del tráfico de Internet ha planteado la necesidad de una inversión en infraestructuras, nuevas tecnologías y paradigmas para servir contenidos a los usuarios. Gracias a fondos europeos, un equipo de investigadores trabaja para ampliar los límites al respecto y, de ese modo, cambiar la manera en que se suministran contenidos y los usuarios puedan acceder «a la carta» a vídeos de imagen tridimensional y en alta definición.