Retroadaptación de buques en pos de la eficiencia energética

La navegación es uno de los pilares de la economía moderna, y en consecuencia es de importancia capital para las empresas europeas. En aplicación de la estricta normativa impuesta por la Organización Marítima Internacional (OMI), unos científicos trabajaron —gracias a fondos europeos— en maneras de atenuar el impacto ambiental de este sector.

El sector marítimo está sometido a una presión creciente por reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Sus operadores son objeto de llamamientos que les apremian a seguir prácticas más respetuosas con el medio ambiente, al tiempo que deben mantener su rentabilidad económica. A este reto se enfrentó el proyecto financiado con fondos europeos REFRESH (Green retrofitting of existing ships), que trató sobre la flota mercante actual y situó la eficiencia energética como un elemento integral del ciclo de vida de todo buque.

El consorcio responsable se propuso suministrar herramientas con que cuantificar la gestión de la energía a bordo de los buques mercantes y mejorar las metodologías de seguimiento mediante la compilación de datos operacionales. Los datos resultantes se utilizaron para apuntalar la toma de decisiones a medio y largo plazo y para articular directrices operacionales con vistas a una retroadaptación ecológica de los buques.

Los socios del proyecto emplearon modelos informáticos para detectar los sistemas y componentes que rendían mal y los reemplazaron por alternativas, a fin de ofrecer un panorama más nítido del rendimiento energético de la embarcación. Asimismo, dado que los cálculos de emisiones están en correlación con el consumo de combustible, se investigó también su efecto en los indicadores clave de rendimiento (KPI).

Los investigadores también efectuaron auditorías energéticas a bordo para evaluar el estado actual de los buques existentes. Con ellas, pudieron dar con soluciones técnicas con que mejorar el consumo energético y también redactar especificaciones para los astilleros, de cara a introducir los cambios en los proyectos de retroadaptación.

Junto a las auditorías energéticas, los científicos emplearon modelos dinámicos de los flujos energéticos para simular diferentes combinaciones de condiciones medioambientales y de carga. Se identificaron los KPI óptimos en función de estos diversos escenarios (p. ej. carga completa y velocidad nominal).

Los operadores dieron una lista de seis barcos para realizar las auditorías energéticas. Conforme a los datos obtenidos, los científicos identificaron una serie de deficiencias energéticas y sugirieron acciones operacionales o de retroadaptación. Eran soluciones conocidas por su potencial de ahorro energético y se analizaron fijándose en su viabilidad técnica y económica.

Gracias a REFRESH, los buques de nueva construcción cumplirán la normativa ambiental desde el principio, generarán un impacto ambiental menor y tendrán mayor eficiencia de combustible que los buques actuales. REFRESH también abordó satisfactoriamente los aspectos de la retroadaptación que son esenciales para mejorar la eficiencia energética a bordo de los buques que ya están en servicio.

publicado: 2016-03-17
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