
Un proyecto financiado con fondos europeos contribuye a la construcción de la primera infraestructura de investigación europea dedicada a la energía eólica. Esta instalación científica situada en Dinamarca facilitará la labor de los investigadores destinada a medir y comprender los mecanismos del viento en el espacio y el tiempo.

Un equipo de investigadores financiados con fondos europeos descubrió un sistema de cogeneración solar rentable que aprovecha el excedente de calor disipado por las células solares para generar agua caliente.

Se ha creado un novedoso sistema híbrido capaz de convertir el calor solar y derivado de una combustión en un suministro continuo de energía eléctrica y, de paso, reducir las emisiones contaminantes.

Las fuentes de energía renovable (FER) como la eólica, la solar, la hídrica, la geotérmica o la biomasa, pueden contrarrestar la demanda mundial de electricidad generada a partir de combustibles fósiles. Un nuevo estudio europeo trata de ampliar las redes actuales para integrar las FER con mayor eficacia.

Europa se ha planteado objetivos climáticos y energéticos ambiciosos para el año 2020 con el compromiso de convertirse en una economía de alta eficiencia energética y bajo consumo de carbono. Una iniciativa de la Unión Europea estudia estrategias para cumplir con la creciente demanda en la producción y el consumo de electricidad.

La combustión de combustibles fósiles para calefacción, refrigeración y electricidad requiere una factoría de grandes dimensiones, genera emisiones importantes y tiene un efecto negativo sobre el medio ambiente. Muy pronto, aprovechar la energía térmica del sol podría ser una alternativa rentable.

Uno de los mayores retos de nuestro tiempo consiste en satisfacer la demanda energética de todo el planeta. ¿Renovables? ¿Nuclear? Fracturación hidráulica? ¿Captura y almacenamiento de carbono? Existe cierta desesperación por descubrir una «panacea». La comunidad científica se afana en estudiar todas las soluciones posibles, abarcando desde métodos matemáticos con los que adaptar los sistemas vigentes hasta distintos planes visionarios para la extracción de energía (algunos disparatados en apariencia.

La situación es muy seria. En abril, las concentraciones de CO2 llegaron a 400 partes por millón por primera vez en tres millones de años. Las emisiones se encaminan hacia un incremento «probable» de la temperatura de entre 4 y 6,1 grados Celsius, cuando la mayoría de los expertos coinciden en que dicho incremento debe mantenerse por debajo de dos grados para evitar una alteración irreversible del clima.