Un robot colaborador en los astilleros

Un equipo de investigadores financiado por la UE ha desarrollado un robot autónomo con miras a aumentar la productividad en la industria naval. Cooperando con los operarios humanos, este robot colaborador puede llevar a cabo tareas arduas y repetitivas en cualquier entorno industrial desestructurado de grandes dimensiones.

Muchos procesos repetitivos de la construcción naval todavía se realizan manualmente, lo cual va en detrimento de las condiciones de trabajo. Ello también perjudica la competitividad de numerosas pequeñas y medianas empresas (pymes) que suministran servicios de aparejamiento a los astilleros. Ante esta tesitura, un equipo de investigadores ha puesto en marcha el proyecto CARLOS (Cooperative robot for large spaces manufacturing) con el objetivo de desarrollar técnicas robóticas adaptables.

Gracias al apoyo de la Unión Europea, estos investigadores han conseguido grandes logros con el proyecto CARLOS, materializados en la aplicación de los últimos avances en robótica móvil cooperativa a un escenario representativo de los astilleros. Empleando componentes comerciales estándar y aplicando un enfoque modular, el equipo del proyecto ha desarrollado un robot colaborador. Este robot es capaz de realizar tareas específicas y navegar de manera semiautónoma por el interior de bloques de superestructuras navales.

En concreto, el robot puede realizar soldaduras de espárragos de manera automática empleando un manipulador móvil y una pistola de soldar fijada a su muñeca. Asimismo, a partir de datos procedentes de un archivo de diseño informatizado, puede aplicar marcas informativas sobre mamparos para facilitar las tareas de aparejamiento. Las pruebas preliminares realizadas con el prototipo final han arrojado resultados satisfactorios.

La tecnología desarrollada gracias al proyecto CARLOS permitirá conseguir una mejora crucial en la productividad de los constructores navales europeos, al mismo tiempo que hará disminuir los fallos de fabricación. Este nuevo robot se podrá aplicar también a la fabricación industrial y la obra civil, en aquellos casos en los que se utilicen estructuras metálicas. Ello permitiría reforzar la posición comercial de las pymes dedicadas al desarrollo y suministro de tecnologías electrónicas y mecatrónicas dirigidas a aplicaciones industriales.

Como cabría esperar, el sistema robótico del proyecto CARLOS ha sido muy bien recibido por la industria y ha obtenido la primera clasificación en el concurso «FreeBots», celebrado en el marco del Festival Nacional de Robótica 2015 —una competición a nivel nacional en el ámbito de la robótica que tiene lugar en Portugal—.

publicado: 2016-06-21
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