En lo que atañe a los esfuerzos económicos internacionales por mantener
la estabilidad climática, está muy extendida la idea de que las
políticas ambientales de diversos países son sustituibles o
independientes. Sin embargo, en un mundo que, como el actual, cada vez
está más interconectado económicamente, quizá esta suposición se ha
tornado ya errónea.
El proyecto financiado con fondos europeos
INTCOP21
ha estudiado la relación que existe a nivel mundial entre la normativa
ambiental y la innovación. Concretamente, el equipo de INTCOP21 ha
analizado de qué modo puede afectar la presencia de dos factores
externos, uno relacionado con el medio ambiente y otro con la
innovación, a la participación en acuerdos medioambientales
internacionales; asimismo, ha estudiado los efectos que la cooperación
ejerce sobre el medio ambiente. Otra de las materias de interés del
proyecto han sido las condiciones que influyen en la aparición de grupos
que impulsan medidas de reducción de las emisiones. Este proyecto
bianual ha utilizado una mezcla de enfoques teóricos, que incluye la
teoría de juegos, la teoría de formación de coaliciones y otras
relacionadas con el comercio exterior. INTCOP21 concluyó a finales de
2013.
En primer lugar, los socios del proyecto se ocuparon de la evolución
de las consecuencias de los gases de efecto invernadero en función de
cada tipo de conducta nacional resultante de la interconexión económica
mundial. Partiendo de que existen unas interdependencias muy intensas,
los investigadores mostraron los efectos que los acuerdos de libre
comercio pueden ejercer sobre el medio ambiente, al tiempo que
cuestionaron si la liberalización del comercio aumenta necesariamente el
bienestar de los países. El documento elaborado en el marco del
proyecto acerca de esta cuestión señala que determinadas premisas
económicas clave que afectan al medio ambiente no han sido tenidas en
cuenta hasta ahora.
Otro asunto abordado por el proyecto ha sido el modo en que la
investigación en I+D y la divulgación tecnológica influyen en los
incentivos para poner en marcha políticas más sólidas en materia de
gases de efecto invernadero. Los resultados iniciales indicaban que la
dependencia de un país con respecto a la capacidad de absorción de su
I+D incrementa la eficacia de sus medidas en ese ámbito. Sin embargo,
esa condición también reduce los beneficios transfronterizos reales, y
ello disminuye el desinterés por invertir en I+D. En general, si las
estrategias en materia de emisiones son sustituibles, un aumento en el
gasto en I+D de un país puede tener el efecto de que otro país disminuya
su nivel de emisiones.
El equipo del proyecto evaluó experimentalmente estas predicciones
mediante un juego de «bienes públicos básicos» en el que participaban
pequeños grupos de personas. Los resultados sugieren que la cooperación
en materia de innovación podría fomentar la colaboración a nivel de
grupo, pero las expectativas de apropiabilidad de la innovación son
fundamentales para comprender las implicaciones que ello supone para
quienes no participan en el acuerdo.
INTCOP21 ha estudiado el vínculo existente entre el comercio
internacional y la eficacia de las políticas ambientales. Concretamente,
el equipo del proyecto ha analizado la dinámica de la inversión en I+D
en términos de niveles de emisiones.