Mejorar la protección de los recursos naturales
Se han analizado las normas internacionales que atañen a la conexión entre los recursos naturales y los conflictos armados para poner de manifiesto sus contradicciones y reducir las incoherencias.
Los recursos naturales y los conflictos internacionales están
interconectados desde hace tiempo. En los últimos años, este vínculo se
ha convertido en un problema de primera línea para las sociedades, por
lo que ha entrado a formar parte de los programas de diversos los
organismos internacionales. Uno de esos organismos es Naciones Unidas
con sus dos arterias principales: la Asamblea General y el Consejo de
Seguridad.
Partiendo de los resultados extraídos de debates políticos recientes
sobre conflictos internacionales por los recursos, el proyecto
NATRESACIL, financiado con fondos de la UE, se propuso examinar en mayor
profundidad las paradojas inherentes a las normativas correspondientes.
A continuación, el proyecto ideó un método para reducir la
fragmentación y las incoherencias presentes en los textos, a pesar de
que los conflictos por los recursos aparecen como un fenómeno unitario.
Esta diversidad puede influir en la actuación de las entidades
involucradas en el conflicto.
NATRESACIL descubrió que el Derecho internacional prohíbe las
guerras de expolio a nivel interestatal. Los conflictos en torno a
recursos naturales también están prohibidos.
Aunque los conflictos limítrofes o por territorio en los que hay
recursos naturales de por medio son habituales, el Derecho internacional
ofrece cierta flexibilidad a la hora de abordar estos conflictos. Desde
este prisma, los Estados pueden negociar el alcance de su autoridad
sobre los recursos naturales a través de opciones como los acuerdos de
desarrollo conjunto. Otra opción es que entidades con personalidad
jurídica resuelvan las disputas territoriales o limítrofes que giren en
torno a recursos naturales.
Cuando se trata de conflictos no internacionales por recursos, las
normas están dirigidas a terceros, para impedirles que financien los
conflictos con el propósito de obtener recursos naturales. Desde este
punto de vista, uno de los resultados principales del proyecto es haber
puesto de manifiesto la posibilidad de un deber de vigilancia de los
Estados sobre las actividades de las empresas multinacionales.
El proyecto logró dar a conocer los principales retos a la hora de
regular de forma eficaz los conflictos por recursos en el Derecho
internacional. Además, abordó la cuestión de la doble vara de medir
cuando se trata de recursos naturales y conflictos armados. Las
conclusiones serán de especial interés para el mundo académico, la
sociedad civil y la función pública.
publicado: 2015-01-29