La infección por el VIH sigue siendo uno de los principales problemas de
salud a nivel mundial. La terapia antirretroviral de gran actividad ha
permitido reducir el número de nuevas infecciones, sin embargo aún hay
millones de persona infectadas por el VIH en todo el mundo. Esto plantea
la necesidad urgente de desarrollar nuevas estrategias terapéuticas
frente al VIH.
Durante la última década, los científicos han estudiado el potencial de inhibidores tópicos del VIH, conocidos como microbicidas. Recientemente, un gel vaginal que contiene un inhibidor de la transcriptasa inversa del VIH redujo aproximadamente en un 40 % la tasa de infección, resaltando la efectividad de este método. La inflamación de la mucosa vaginal y/o rectal se ha relacionado con una mayor probabilidad de infección por el VIH.
El objetivo principal del consorcio financiado por la Unión Europea CHAARM (Combined highly active anti-retroviral microbicides) era desarrollar nuevos microbicidas frente al VIH incluyendo el uso combinado de fármacos antirretrovirales. Las actividades del proyecto incluyeron el descubrimiento y el desarrollo de fármacos y una plataforma integral de prueba de microbicidas. También se llevó a cabo una serie de estudios de formulación para la administración de microbicidas en la mucosa vaginal y rectal. El consorcio también estudió el microbioma vaginal dado su papel en la susceptibilidad a la infección por el VIH.
Los investigadores emplearon explantes de tejido vaginal y colorrectal como modelos experimentales ex vivo así como modelos experimentales de primates no humanos con el fin de comprobar las propiedades farmacocinéticas y la eficacia de una variedad de microbicidas. Una combinación de dos fármacos antirretrovirales demostró ser la opción más eficaz y su seguridad fue evaluada por medio de un ensayo clínico de fase I. Análisis estructurales de la interacción del receptor CCR5 tanto con inhibidores como con las enzimas transcriptasa inversa e integrasa del VIH proporcionaron la base para el desarrollo de inhibidores más eficaces.
En conjunto, los resultados del proyecto CHAARM mejoraron la comprensión sobre los procesos biológicos básicos que rigen la infección por el VIH y condujeron a la identificación de nuevas dianas potenciales para el tratamiento de esta enfermedad. Los microbicidas sinérgicos no solo actúan frente a cepas divergentes del VIH-1, sino que también son menos propensos a originar cepas virales resistentes a múltiples inhibidores. Vea
aquí un vídeo sobre el proyecto.