Después de que se produzca un episodio de IAM, la zona necrosada del
corazón presenta una respuesta regenerativa limitada. Aunque la
prognosis a largo plazo ha experimentado una mejoría con la introducción
de las terapias de reperfusión, en determinados casos la mortalidad
puede ser aún elevada.
Durante el último decenio, diversos estudios pusieron de manifiesto la eficacia clínica de la administración de células mononucleares de médula ósea autólogas después de un episodio de IAM. El proyecto
BAMI (The effect of intracoronary reinfusion of bone marrow-derived mononuclear cells [BM-MNC] on all-cause mortality in acute myocardial infarction), financiado con fondos comunitarios, se plantea dilucidar si la terapia basada en este tipo de células resulta más beneficiosa que la terapia de reperfusión estándar.
El consorcio encargado de la iniciativa está realizando un estudio internacional de Fase III, aleatorizado y controlado a fin de demostrar que una infusión intracoronaria de células mononucleares de médula ósea ofrece mayores garantías que una terapia de reperfusión óptima por sí sola. Hasta el momento, los socios participantes han comparado distintos métodos para el procesamiento de médula ósea a fin de proporcionar la parte de la célula mononuclear deseada y se ha estandarizado su método óptimo de preparación para que pudiesen suministrarse en hospitales de toda la UE.
Además, los científicos del proyecto han seleccionado la forma más adecuada para la prestación del tratamiento. En el contexto del IAM, la infusión intracoronaria es la técnica que se utiliza habitualmente para administrar las células, ya que está respaldada por evidencias y datos en torno a su seguridad. Este procedimiento implica una angioplastia de globo y una infusión de células a través de un globo «over-the-wire» (OTW). El ensayo clínico se llevará a cabo en ochos países participantes con otros doce centros satelitales activos en toda Europa, que han reunido hasta la fecha a un total de ochenta y cuatro pacientes.
En conjunto, el estudio BAMI servirá para comprobar de manera fehaciente la eficacia que muestra la terapia con células mononucleares de médula ósea en pacientes que se sometan a angioplastia primaria. Teniendo en cuenta las pérdidas económicas en que se incurre a consecuencia de las bajas por enfermedad de los distintos pacientes o la incapacidad de trabajar dado el carácter crónico del IAM, esta mejora en la intervención terapéutica debería reducir las tasas de hospitalización y mortalidad.