La diabetes es un problema médico de gran importancia ya que daña el sistema cardiovascular, motivando la aparición de trastornos cardiovasculares. Un proyecto europeo de investigación se propone comprender cómo la diabetes altera la fisiopatología de los vasos sanguíneos.
El sistema cardiovascular permite a la sangre circular por todo el cuerpo suministrando nutrientes y oxígeno, manteniendo la temperatura corporal y la homeostasis de todo el organismo. Dependiendo del tamaño de los vasos sanguíneos, el sistema cardiovascular se divide en microcirculación y en macrocirculación, que están caracterizadas por distintos mecanismos de autorregulación aunque interconectados fisiológicamente y anatómicamente. Además, estos circuitos se comunican entre sí por medio de factores hemodinámicos (presión y flujo) y neurohumorales.
Durante el curso de procesos patológicos se ponen en marcha diferentes mecanismos adaptativos que actúan con el fin de evitar daños. Si estos mecanismos fallan, entonces se produce la transducción de señales patológicas entre los dos circuitos, lo que provoca una grave alteración de la comunicación.
El objetivo principal del proyecto financiado por la Unión Europea MMC era determinar la comunicación vascular y hemodinámica entre la microcirculación y la microcirculación en diferentes tejidos humanos. Dada la asociación entre la diabetes y la enfermedad cardiovascular, los investigadores del proyecto MMC se centraron en el estudio de individuos con resistencia a insulina.
Cerca de mil quinientos sujetos con y sin diabetes con edades comprendidas entre los cuarenta y los setenta y cinco años y residentes en los Países Bajos fueron seleccionados para un estudio correlativo. Se llevó a cabo un fenotipaje completo de los vasos y de las características de la microcirculación y de la macrocirculación.
Los datos del estudio MMC junto con datos de metanálisis de otros estudios corroboraron la interconexión entre los dos circuitos vasculares. Es más, estos señalaron que un aumento de la presión pulsátil es un síntoma del envejecimiento de la macrocirculación debido a factores fisiológicos o a causas relacionadas con la diabetes. Además el mal funcionamiento de la macrocirculación está relacionado con una alteración de la microcirculación en varios órganos. En la diabetes, mecanismos adaptativos o maladaptativos causan una mayor rigidez arterial y una mayor presión pulsátil. La función de la microvascularización cutánea fue una excepción a estas observaciones, ya que esta no se vio afectada por la rigidez de arterias grandes o por la diabetes.
Determinar los mecanismos por medio de los que los circuitos vasculares se adaptan a señales patológicas es de gran importancia para comprender cómo se desarrolla la enfermedad cardiovascular. Desde un punto de vista clínico, se espera que la información del proyecto MMC mejore la prevención y la gestión temprana de la enfermedad cardiovascular.