Consumo de altramuces para proteger el corazón

Las semillas de la especie Lupinus, también conocidas como altramuces, han sido consumidas por las poblaciones del Mediterráneo desde hace miles de años. Estas fuentes alimenticias ricas en proteínas podrían ser una alternativa sostenible y más saludable a la leche, la carne, el huevo o la soja.

El proyecto «Innovative functional foods based on sweet lupin protein for cardiovascular prevention» (LUPICARP) , financiado con fondos comunitarios, investigará los beneficios para la salud de los altramuces dulces como alimento y pienso. Mediante un estudio multicéntrico aleatorizado se comparará el efecto de las dietas a base de altramuces con las de proteínas animales en cuanto al metabolismo del colesterol.

Se evaluará su capacidad para reducir o prevenir la dislipidemia empleando los valores del colesterol transportado por lipoproteínas de baja densidad, así como los marcadores inflamatorios y metabólicos. También se evaluarán otros aspectos importantes, como el sabor, los factores nutricionales, la seguridad, las condiciones de crecimiento, el rendimiento y otras aplicaciones.

Las revisiones de la literatura y los estudios científicos anteriores, incluidos varios proyectos financiados con fondos comunitarios, han puesto de manifiesto que los altramuces se componen de un 35-40 % de proteínas, mucha fibra y antioxidantes. Los altramuces dulces son bajos en alcaloides (que producen el sabor amargo) y apenas tienen sustancias antinutricionales, como los fitoestrógenos. Las alergias primarias derivadas del consumo de altramuces son extremadamente raras. Otra ventaja es su capacidad de estabilizar emulsiones y espumas.

Para garantizar la optimización de los productos y su comercialización, el consorcio del proyecto LUPICARP se compone de cinco fabricantes de alimentos a base de altramuces, un productor de ingredientes a base de los mismos y cinco ejecutores de investigación y desarrollo tecnológico sitos en instituciones académicas y hospitales. El acuerdo de consorcio se formalizó al inicio del proyecto para facilitar la transferencia de tecnología, tratando el reparto de los derechos de propiedad intelectual y las patentes.

De acuerdo con los documentos de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y los reglamentos europeos, LUPICARP garantiza que los alimentos utilizados en el estudio clínico serán seguros. Se han tenido en cuenta los niveles de alcaloides y composiciones nutricionales y se han resuelto los aspectos logísticos difíciles, como el almacenamiento y el envío de los alimentos. Se obtuvo la aprobación para el estudio clínico. Se prepararon nueve casos de negocio para las pequeñas y medianas empresas (PYME) participantes.

A nivel mundial, el aumento de la población ha elevado la demanda de alimentos y piensos ricos en proteínas. Esta tendencia dejará de ser sostenible desde el punto de vista ecológico, a menos que se utilicen más fuentes de origen vegetal, pues las proteínas vegetales precisan menos agua y un uso intensivo del suelo y consumen dióxido de carbono, uno de los principales causantes del calentamiento global. La aprobación de la declaración de propiedades saludables de los productos alimenticios a base de altramuces impulsará a las PYME del sector alimentario de la UE, ya que se prevé una facturación de varios millones de euros.

publicado: 2015-05-26
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