La investigación oncológica

Pero no hace falta consultar las estadísticas para constatar sus efectos; la mayoría de los europeos conoce algún caso de cáncer entre sus amistades o familiares o incluso puede que lo haya sufrido en carne propia. El cáncer ataca de forma indiscriminada y con repercusiones devastadoras. No obstante, en muchos casos se puede evitar y la detección precoz aumenta considerablemente las posibilidades de superarlo.

De hecho, desde la OMS se afirma que se sabe lo suficiente sobre las causas del cáncer como para evitar al menos un tercio de todas las incidencias, e incluso algunos de los tipos más comunes como el de mama, el colorrectal y el de cuello uterino pueden curarse si se detectan a tiempo.

Este conocimiento se ha obtenido mediante un esfuerzo científico intenso que también ha dado lugar al desarrollo de terapias y tratamientos. En Horizonte 2020 se presta apoyo a iniciativas al respecto mediante el reto Salud, cambio demográfico y bienestar. Las actividades de investigación e innovación respaldadas por esta convocatoria aspiran, por ejemplo, a ampliar el conocimiento que se posee sobre las causas y los mecanismos que rigen la enfermedad y mejorar nuestra capacidad de vigilar la salud y prevenir, detectar, tratar y gestionar las enfermedades.

Las actividades científicas darán lugar a tratamientos y métodos de detección mejorados y además facilitarán la elaboración de políticas. La Unión Europea creó recientemente un grupo de expertos en lucha contra el cáncer cuyo propósito es el de aprovechar este tipo de investigaciones para asistir a la Comisión en la redacción de instrumentos jurídicos y documentos políticos, directrices y recomendaciones en pos de la lucha contra el cáncer.