Si uno se topa con el profesor Green en la Universidad de Oxford (Reino
Unido), lo más probable es que esté trabajando intensamente en
desarrollar el tema al que se dedica su ayuda de investigación, de cinco
años de duración, «Approximate Algebraic Structure» (AAS, estructura
algebraica aproximada). En este proyecto, observa lo que sucede cuando
los axiomas empleados para definir varios objetos matemáticos, tales
como los grupos (cierto conjunto de elementos y una operación que
cumplen ciertas condiciones) o los polinomios (expresiones compuestas
por variables y coeficientes), se relajan y dan lugar a las llamadas
variantes "aproximadas" de estos objetos. Este problema, inescrutable
para los legos en la materia, es esencial para resolver nudos gordianos
de las matemáticas —como por ejemplo contar configuraciones de números
primos— y posee diversas aplicaciones. Sin embargo, para el profesor
Green, el problema tiene interés en sí mismo, como le ha sucedido con
todos los rompecabezas matemáticos con los que se ha encontrado en el
transcurso de su carrera.
La alabanza más grande
«Yo soy un matemático puro. Me motivan las cuestiones matemáticas
que son naturales y bellas, no sus aplicaciones específicas. La historia
ha demostrado en reiteradas ocasiones que las matemáticas creadas de
esta manera pueden dar lugar posteriormente a aplicaciones importantes y
muy amplias, pero no creo que la mayoría de los matemáticos puros
tengan esto como su principal motivación. En matemática pura, me dedico
más a resolver problemas que a formular teorías, aunque sí ha surgido un
cuerpo teórico relativamente grande de mi colaboración con Terence Tao y
otros», explica.
Terence Tao colabora con el profesor Green desde hace mucho tiempo y su labor se hizo acreedora recientemente del premio
Breakthrough 2014,
patrocinado por algunos grandes empresarios y por alguien conocido como
Mark Zuckerberg. ¿Cuál fue la mayor recompensa? «Me alegré mucho por
Terence. Entiendo que uno de los objetivos fundamentales de ese galardón
es dar a conocer a los mejores matemáticos entre el gran público.
Espero que así lleguen también a conocerse mejor las propias
matemáticas, y no sólo los nombres de los ganadores».
Ben Green es uno de esos matemáticos para los que la más preciosa
recompensa es el reconocimiento por su trabajo. Y considera que su
próxima conferencia plenaria en el ICM, el 19 de agosto, constituye un
gran honor. Ciertamente lo es, si se tiene en cuenta que en la relación
de oradores en sesiones plenarias de ediciones anteriores se encuentran
algunos de los matemáticos de mayor renombre del siglo XX.
«Alguien me contó una vez que los matemáticos suelen trabajar para
conseguir la aprobación reacia de un puñado de colegas matemáticos. Hay
algo de cierto en ello, y para mí el reconocimiento más significativo es
que otros matemáticos consideren positivamente algo que yo hago»,
asegura el profesor Green.
Dar el relevo
Pero hay otra clase de logro que mueve a este eminente matemático:
suscitar interés por las matemáticas y ayudar a jóvenes matemáticos a
brillar. Ha impartido varias conferencias ante públicos generalistas y,
sin ir más lejos, su beca del CEI al proyecto AAS está dedicada
principalmente a financiar a investigadores postdoctorales. «Las ayudas
procedentes de organismos como el CEI nos permiten atraer a candidatos
extremadamente cualificados para que vengan a trabajar en Europa»,
señala el profesor Green.
A través del proyecto AAS, el matemático ha podido formar un equipo
completo en Oxford y está disfrutando del provecho que aportan los
intercambios con colegas para un progreso rápido. Algunos de los
integrantes de este equipo ya han alcanzado grandes éxitos pese a sus
cortas carreras.
«Nuestros estudiantes pueden competir con los mejores a nivel
mundial. Quizás nuestro sistema educativo les inculca ciertas
cualidades, como independencia y creatividad, a las que posiblemente no
se preste tanta atención en todas partes y que, sin duda, no son fáciles
de medir», apunta el profesor Green. Aunque algunos responsables
políticos se lamentan del «bajo rendimiento» de los estudiantes en
matemáticas, él piensa que la disciplina tiene ante sí un futuro
prometedor, siempre que logre superar ciertos retos.
«Las matemáticas ya gozan de cierto prestigio en los medios de
comunicación. Es alentador observar la difusión de artículos y
conferencias bien elaborados y dirigidos a un público generalista. No
obstante, aún se está muy lejos de haber llegado a un aprecio universal
del papel que tienen las matemáticas como materia fundamental para casi
todas las vertientes de la vida moderna. Grandes sectores de los medios
de comunicación y del público siguen viendo a los matemáticos como unos
simples "cerebritos" que trabajan en la oscuridad más total sobre temas
de los que no tienen esperanza alguna de comprender ni lo más básico»,
lamenta el profesor Green.
En su opinión, una buena manera de comenzar a mejorar las cosas
sería valorar más a los profesores, pagándoles más, eliminando las
trabas burocráticas para que puedan dedicarse a lo esencial de su
trabajo y permitiéndoles que programen el curriculum ellos mismos. A la
larga, ello les capacitaría para centrarse en lo que importa de verdad:
crear vocaciones y apoyar a individuos con talento.
Para estos últimos, el profesor Green ofrece un consejo:
«¡Esfuérzate!». «Intenta centrarte en un problema concreto lo antes
posible en tu carrera científica, en lugar de dedicarte varios años a
leer todo lo que se ha escrito sobre la materia. No tiene por qué ser
una cuestión especialmente conocida (de hecho, no debería serlo), sino
un tema que encuentres interesante».
Detalles del proyecto:
Área de investigación: Matemáticas (PE1)
Investigador principal: Ben Green
Institución de acogida: Universidad de Oxford (Reino Unido)
Proyecto del CEI: «Approximate algebraic structure and applications» (AAS)
Convocatoria del CEI: Beca Inicial (Starting grant) 2011
Financiación del CEI: 1,88 millones de euros para cinco años
Página web del investigador