Durante los próximos diez años, la iniciativa emblemática GRAPHENE recibirá unos 1 000 millones de euros de financiación de la Comisión Europea, Estados miembros y países asociados, lo que convertirá a Europa en un agente clave en el desarrollo de una nueva generación de materiales, componentes y sistemas.
La iniciativa saltó a la palestra para desvelar algunos de los resultados de su investigación —aún en curso— en el
Mobile World Congress, celebrado del 27 de febrero al 2 de marzo en Barcelona (España). Durante su charla en el evento Graphene Experience Zone —organizado por la iniciativa—, el premio Nobel Konstantín Novosiólov, de la Universidad de Mánchester, afirmó lo siguiente: «Antes, la cantidad de prototipos que podíamos presentar era bastante reducida».
Sin embargo, hemos aprendido de las experiencias previas, mantuvimos contactos con una serie de empresas, descubrimos las necesidades del sector industrial y conseguimos adaptarnos, de forma que este año hemos podido demostrar muchos más productos relevantes».
Las aplicaciones prácticas y las demostraciones relativas a una veintena de tecnologías basadas en el grafeno abarcaron cinco ámbitos: el Internet de las cosas (IoT) y sensores, dispositivos ponibles y salud, comunicación de datos, energía y composites.
Del laboratorio a los hogares
Wide Hogenhout, coordinador de proyectos de la Unión Europea responsable de la Iniciativa emblemática GRAPHENE lo explica en los siguientes términos: «El objetivo del proyecto [...] consiste en destacar en beneficio del sector industrial europeo, generar empleo y mejorar la vida de los ciudadanos del continente»
Entre los ejemplos concretos de las innovaciones que están en camino se incluyen avances que tendrán una gran repercusión para el IoT, con aplicaciones que varían del control ambiental de compuestos químicos peligrosos hasta las destinadas a evitar colisiones entre vehículos sin conductor. En el evento de Graphene Experience Zone se demostró el modo en que se pueden combinar luz visible e infrarroja para evitar colisiones incluso en condiciones de niebla espesa. También se presentó una variedad de sistemas de píxeles mecánicos a todo color diseñados para pantallas de bajo consumo energético y de tinta electrónica, así como diversos sensores táctiles y de presión de alto rendimiento para futuros dispositivos y objetos inteligentes.
El grafeno resulta mucho más ligero que los materiales a los que puede reemplazar, una característica de la que saca partido el superdeportivo BAC Mono, fabricado en el Reino Unido. Los pasos de las ruedas traseras están fabricados con un compuesto de grafeno, y la consiguiente reducción de peso ofrece al conductor una considerable mejora en las prestaciones del vehículo.
Un papel relevante para el grafeno biocompatible en sensores médicos
La iniciativa también puso de manifiesto la importancia del grafeno para el sector médico, pues dada su estabilidad y biocompatibilidad, este material resulta útil para el desarrollo de dispositivos implantables. Las propiedades de este material pueden ofrecer beneficios en aplicaciones relacionadas con tratamientos inteligentes, ADN y una gran variedad de analitos como la glucosa, el glutamato, el colesterol y la hemoglobina.
Asimismo, los investigadores pudieron demostrar el funcionamiento de un implante de retina que convierte la luz en señales eléctricas y las transmite al cerebro a través del nervio óptico gracias a una interfaz de grafeno.
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