La idea de construir aeronaves más ligeras, eficientes y aerodinámicas
es fundamental para alcanzar un ahorro energético y disminuir la huella
de carbono de la industria aeronáutica. El proyecto
FUTUREWINGS
(Wings of the future), financiado por la UE, contempla un aeroplano
cuya forma puede cambiar durante el vuelo —por ejemplo, mediante alas
mórficas— con el propósito de aumentar la eficiencia de dicho vuelo. En
el marco de este proyecto se ha comprobado la viabilidad de un concepto
tan radical como este, centrándose en el desarrollo de un larguero de
paredes delgadas cuya forma se puede controlar mediante actuadores
piezoeléctricos.
Para conseguir este objetivo, el equipo implicado en el proyecto ha estudiado cómo aplicar la tecnología piezoeléctrica con miras a manipular la forma de largueros u otros elementos estructurales empleados en la ingeniería aeroespacial. Se ha elaborado un sistema de control electrónico novedoso, necesario para activar conjuntos de componentes fabricados con materiales compuestos a base de macrofibras, y se ha definido los procedimientos numéricos que permiten simular estructuras híbridas.
Uno de los logros fundamentales de este proyecto ha sido el diseño y ensayo de muestras de torsión y de doblado, fabricadas con materiales compuestos híbridos activos. El equipo de trabajo también ha verificado el análisis numérico y el diseño del concepto «Future-Wing».
El siguiente paso en el proyecto FUTUREWINGS ha consistido en comparar la aeroelasticidad del modelo de avión concebido con la de una aeronave convencional y en realizar simulaciones de vuelo de cara a validar el comportamiento aeromecánico de este concepto de avión futurista.
En efecto, con este proyecto se ha avanzado en el uso de material inteligente que transforma las alas y la cola del avión en un «tejido vivo», lo cual facilita el control de la aeronave al modificar la forma de sus superficies y sus características aerodinámicas. Los resultados de esta investigación se han divulgado mediante talleres y publicaciones, y al mismo tiempo los participantes en el proyecto han trazado planes para seguir colaborando más allá de la finalización del mismo. Si bien todavía se hallan en una fase temprana de desarrollo, las estructuras conocidas como «mórficas» podrían desempeñar un papel determinante en la aviación y la ingeniería del futuro.