Desarrollar una agricultura intensiva sostenible ayudará a superar los
retos que penden y penderán sobre la población mundial, en crecimiento
constante. Un medio de aumentar la productividad agrícola es la
automatización, si bien antes es necesario desarrollar sistemas de
ingeniería complejos y sofisticados.
El proyecto
CROPS (Intelligent sensing and manipulation for sustainable production and harvesting of high value crops, clever robots for crops) se dedicó a desarrollar una plataforma robótica capaz de realizar un fumigado abarcando toda una parcela y también de realizar un cosechado selectivo de frutas. El diseño de los robots se orientó hacia cultivos de gran valor, tales como hortalizas de invernadero, frutales o uvas para vinos de excelente calidad.
La tecnología desarrollada será capaz de identificar la fruta y detectar su grado de madurez para, a continuación, agarrarla suavemente y recoger con delicadeza únicamente los frutos maduros. Además, los socios del proyecto construyeron robots capaces de detectar y clasificar una gama amplia de objetos. La capacidad de evaluación de obstáculos y otros objetos permitirá a estos robots desplazarse de manera autónoma y desenvolverse en plantaciones y huertos de árboles frutales.
En la iniciativa se establecieron los requisitos para los sistemas de detección y de supervisión y control, se desarrollaron arquitecturas de sistema para detectar y agarrar la fruta y se fabricaron y probaron prototipos de manipuladores. Todo ello dio lugar a la fabricación de un robot totalmente funcional para recolectar pimientos morrones y manzanas que superó satisfactoriamente las pruebas en el laboratorio, en invernaderos y huertos. Este mismo robot se utilizó para realizar un fumigado dirigido en viñas. Para el fumigado integral (en barrido desde arriba) se construyó y probó un robot específico.
En CROPS anticipan que la plataforma robótica llegue a reducir los costes de recolección en un 40 % También podría generar un destacado beneficio medioambiental al reducir en un treinta por ciento el uso de plaguicidas. Además, se logrará reducir el uso de productos químicos en un noventa por ciento gracias a la aplicación selectiva de plaguicidas, por ejemplo únicamente a los racimos de uvas.
Al quedar menos residuos químicos en los cultivos, mejorará la calidad del producto. Empleando el sistema robótico, el producto se podrá recolectar en el momento óptimo. Por añadidura, pudiendo prescindirse de los humanos para la recolección, se reducirá su exposición a los productos químicos de uso agrícola y mejorará la seguridad alimentaria. Por último, con la capacidad de determinar la calidad de cada fruto de forma individual así como la composición química de los racimos de uva recolectados, se incrementará la calidad y la homogeneidad de los vinos.
CROPS generará empleos de elevado perfil tecnológico en los sectores de fabricación de máquinas y detectores, de modo que fortalecerá la economía rural y atenuará la migración hacia los centros urbanos. Finalmente, el desarrollo y la producción de robots agrícolas y silvícolas permitirán que la industria de la maquinaria de Europa se mantenga en una posición de liderazgo a escala mundial.