Una nueva gama de materiales autocurantes
Un proyecto financiado con fondos europeos está evaluando el potencial técnico y comercial del autocurado en varios materiales, incluidos polímeros, composites poliméricos, hormigón y cerámicos. Los nuevos procesos resultan prometedores.
Ciertos tipos de materiales sintéticos están diseñados para reparar
químicamente grietas y otros defectos en su estructura. Esos materiales
se conocen de manera generalizada como autocurantes, y a menudo
presentan ventajas de durabilidad.
En el proyecto financiado con fondos europeos «Training network for
self-healing materials: From concepts to market» (SHEMAT) se están
investigando esos materiales. El consorcio formado por nueve miembros
tiene como objetivo principal incorporar características de autocurado
en varios materiales y comercializar los resultados.
Además, en el proyecto SHEMAT se intentará desarrollar métodos
normalizados para la caracterización del potencial de autocurado, un
objetivo crucial de cara a la comercialización y que sólo se está
persiguiendo en el marco de SHEMAT. El proyecto se centra en cuatro
tipos de materiales: polímeros, composites poliméricos fibrorreforzados,
hormigón y cerámicos. La iniciativa, de tres años de duración,
concluirá a finales de 2015.
Hasta la fecha, se han seleccionado 15 investigadores jóvenes para
el programa de desarrollo profesional incluido en el proyecto.
El trabajo comenzó con un taller destinado a definir la evaluación
de los materiales autocurantes, lo que supone un paso hacia la obtención
de un método para su caracterización.
Además, el equipo comparó los costes económicos de la producción de
esporas bacterianas a gran escala en las condiciones de cultivo clásicas
y las nuevas para aplicaciones en hormigón. La investigación concluyó
que la técnica nueva, en combinación con productos de desecho de
tratamiento de aguas, da lugar a una reducción de costes significativa.
El estudio demostró asimismo que en determinadas condiciones
químicas es posible obtener recubrimientos de barrera térmica (TBC)
autocurantes. El curado de los daños por agrietamiento en dichos
materiales se produce mediante oxidación a las temperaturas de servicio.
El concepto TBC se ha transferido a un nuevo proyecto con financiación
de la UE para su explotación comercial.
El proyecto ha demostrado además las características autocurantes de
fases MAX con compuestos de aluminio, en las que la oxidación selectiva
rellena los puntos dañados. El proceso de curado de grietas es
aplicable a varios compuestos de titanio y cromo. Para uno de los casos
se ha presentado una cuantificación completa, que muestra que es posible
conseguir una recuperación plena de la resistencia y un curado
reiterado. Se están contemplando distintas opciones de fabricación.
Hasta la fecha, en el proyecto SHEMAT se han realizado avances hacia
la definición de la química de determinadas aplicaciones de materiales
autocurantes. Los resultados facilitan la aplicación comercial de los
procesos.
publicado: 2015-02-03