Tendencias científicas: Las dificultades y tribulaciones de ser zurdo
El trece de agosto está reconocido en todo el mundo como el Día Internacional de los Zurdos y, por este motivo, durante la pasada semana, se ha dedicado mucha atención a las causas biológicas y genéticas de la condición de zurdo entre los seres humanos, así como las implicaciones sanitarias, sociales y económicas de ser zurdo.
Aproximadamente entre el diez y el doce por ciento de la población mundial (incluido el autor de este artículo) es zurda. Algunos personajes zurdos célebres han sido Leonardo Da Vinci, Marilyn Monroe, Lewis Caroll, David Bowie, Kurt Cobain, Jimmi Hendrix, Julius Caesar, Neil Armstrong, Winston Churchill, Barack Obama, Bill Clinton, Napoleon Bonaparte y Bart Simpson. Sin embargo, a lo largo de la historia, las personas zurdas también han tenido que hacer frente a la discriminación y al estigma social, además de tener que soportar las dificultades prácticas de vivir en un mundo de diestros.
Entre derecha e izquierda
Muchos investigadores creen firmemente que la genética desempeña un papel crucial a la hora de determinar la condición de zurdo de una persona.
En un estudio de 2013 publicado en «PLOS Genetics», se identificaron genes y mutaciones genéticas que podrían influir supuestamente en el desarrollo de una «asimetría entre los lados izquierdo y derecho». En otro estudio de 2013 realizado por la Universidad de St. Andrews se constató que las personas zurdas comparten la misma anomalía genética que aquellas que presentan «situs inversus» (cuando los órganos principales del cuerpo están dispuestos en el lado contrario al de sus posiciones normales; esta malformación afecta a aproximadamente una de cada veinte mil personas), lo que refuerza la teoría de que la genética influye de manera determinante. Otros investigadores sostienen en cambio que la genética probablemente solo explicaría en torno al veinticinco por ciento de los factores que condicionan el uso de una mano u otra; el setenta y cinco por ciento restante aún estaría por determinar.
Sean cuales sean las razones físicas o genéticas que explican el hecho de ser zurdo, otros estudios han revelado que no existen grandes diferencias entre las personas diestras y zurdas en lo que se refiere a rasgos de la personalidad como la emotividad, extroversión, afabilidad, responsabilidad y aceptación de experiencias nuevas. Sin embargo, hay pruebas de que existen algunas diferencias más sutiles entre los zurdos y la mayoría de diestros. Muchos de los grandes artistas creativos del mundo han sido zurdos y se ha demostrado que estas personas presentan una ventaja documentada en un área de la creatividad, el pensamiento divergente (inconformista), o dicho de otro modo, la capacidad de generar ideas creativas mediante la búsqueda de muchas soluciones posibles.
Un estudio realizado en 2009 en la Universidad de Stanford concluyó que las personas zurdas piensan de forma diferente de los diestros. Cuando se les mostraban dos columnas de ilusiones abstractas y se les pedía que identificasen cuáles eran positivas, los participantes diestros tendían a elegir las de la derecha, mientras que los zurdos elegían las de la izquierda. Los autores del estudio pensaron que esta circunstancia podía influir en determinadas decisiones de carácter social, como qué candidatos prefieren en un debate (según la posición que ocupen en relación con la persona) o el comportamiento al votar.
Factores cognitivos y económicos
Sin embargo, se ha demostrado que las personas zurdas son más propensas a sufrir problemas de salud mental que los diestros. Investigadores de la Universidad de Yale han observado que los zurdos tienen más probabilidades de padecer trastornos psicóticos, como la esquizofrenia, en comparación con los trastornos del estado de ánimo, como la depresión o el síndrome bipolar, que no guardan una correlación destacable con la mano que se utiliza. Además, en torno al treinta por ciento de los zurdos tienen un hemisferio cerebral no dominante; esto significa que tienen un riesgo mayor de desarrollar disfunciones cognitivas del aprendizaje desde una edad temprana.
Desde el punto de vista económico, los estudios también han expuesto las desventajas de ser zurdo. En 2014, el profesor de Harvard, Joshua Goodman, publicó un artículo donde afirmaba que las personas zurdas perciben sueldos notablemente inferiores a los de los diestros y tienen menos probabilidades de finalizar sus estudios universitarios. Observó que la mediana de ingresos de las personas zurdas es aproximadamente un diez por ciento inferior a la de las personas diestras. Esto se explicaba, según su teoría, por la probabilidad estadísticamente superior de que los zurdos padezcan algún problema de tipo cognitivo a lo largo de sus estudios.
Una ventaja para los deportes
En el lado más positivo, varios estudios han demostrado que los zurdos presentan una ventaja competitiva en los deportes, sobre todo en los individuales, como el tenis. Esto se debe a que los deportistas zurdos suelen entrenarse con oponentes diestros y, por ello, saben adaptarse mejor cuando se enfrentan a otros zurdos. Los deportistas diestros se encuentran en una situación de desventaja debido a que no tienen que competir con tanta frecuencia contra jugadores zurdos.
En otros tiempos, estas ventajas también podrían haber beneficiado a los zurdos en los combates físicos mano a mano; de aquí proviene otra teoría sobre por qué sigue habiendo personas zurdas entre nosotros, y la razón no sería otra que porque ser zurdo supone una ventaja evolutiva sobre la mayoría de población diestra.
¿Ser zurdo ofrece algún tipo de ventaja física (aparte del ámbito deportivo) que aún está presente en la sociedad moderna? Sin duda seguirán proliferando debates científicos entre los investigadores en torno a uno de los rasgos humanos más inusuales pero que más perduran en el tiempo.
publicado: 2016-08-23