Tubos de quitosano para ayudar a regenerar los nervios periféricos dañados

El daño a los nervios periféricos constituye una causa de discapacidad grave. Un consorcio europeo consiguió desarrollar un implante nervioso que favorece la reparación de nervios dañados.

A diferencia del sistema nervioso central, los nervios periféricos poseen capacidad regenerativa. No obstante, si la lesión es considerable, esta regeneración resulta muy limitada y da lugar a la pérdida de función del músculo afectado. Surge, pues, la necesidad de hallar terapias innovadoras para las lesiones de nervios periféricos.

Los artífices del proyecto BIOHYBRID (Biohybrid templates for peripheral nerve regeneration) trabajaron para desarrollar un implante hecho con quitosano biopolimérico para la reparación de nervios dañados en toda su longitud. Este dispositivo, obtenido a partir de caparazones de crustáceos, está diseñado para sortear el hueco en el tejido nervioso y activar la regeneración entre los extremos proximal y distal del nervio cercenado. El método experimental integral propuesto por los socios del proyecto consistía en la prefabricación de un dispositivo nervioso biohíbrido, su trasplante en los huecos entre nervios periféricos dañados en un modelo animal y la evaluación del resultado de la regeneración.

Después de tres años de trabajo, los socios de BIOHYBRID probaron las matrices tridimensionales basadas en tubos huecos de quitosano que conforman este novedoso implante nervioso. Un estudio a gran escala y un estudio a media escala in vivo para evaluar los tubos huecos de quitosano con diferentes grados de acetilación condujo al desarrollo final de la guía de regeneración nerviosa Reaxon®, ya autorizada como dispositivo clínico. Estos tubos nerviosos permitieron, además, una regeneración salvando huecos de 15 mm en animales.

Los estudios in vitro sobre la funcionalización de la matriz tridimensional mostraron que el empleo de factores neurotróficos conjugados con nanopartículas de óxido de hierro proporcionan las propiedades necesarias a las matrices, hecho que motivó una solicitud de patente. La evaluación in vivo mostró que la implantación de células de Schwann con una mayor expresión del factor de crecimiento de fibroblastos 2 favorecía la regeneración axonal. También se caracterizaron las diferencias en la regeneración de nervios periféricos entre ratas macho y hembras sanas y diabéticas.

El proyecto BIOHYBRID desarrolló un plan detallado de investigación clínica para evaluar la reparación de las lesiones del nervio medio y cubital en seres humanos empleando la guía de regeneración nerviosa Reaxon®. La guía Reaxon® fue implantada en un grupo reducido de pacientes con lesiones en los nervios periféricos en Alemania tras su salida al mercado en junio de 2014. El consorcio ultimó la preparación de un ensayo clínico multicéntrico con Reaxon® en nervios medios y cubitales y remitió la solicitud correspondiente a la FDA.

Los resultados del ensayo clínico favorecerán aplicaciones futuras de los avanzados tubos compuestos de quitosano. Además, se espera que el uso clínico de este novedoso implante nervioso desarrollado mediante bioingeniería reduzca el tiempo de recuperación y favorezca que los pacientes afectados recuperen con celeridad una calidad de vida plena.

publicado: 2016-07-06
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