En los últimos veinte años, el óxido nítrico (NO) ha sido reconocido como un importante mensajero químico en plantas. Empleando una combinación de técnicas bioquímicas y bioinformáticas, investigadores europeos han identificado miles de potenciales proteínas diana y sitios de unión específicos a NO, abriendo una nueva vía para probar su función.
Los organismos vivos presentan una compleja red de señalización
bioquímica para llevar a cabo prácticamente todas las funciones vitales,
desde el nivel celular hasta el nivel de organismo. El NO desempeña un
papel importante en la regulación de funciones en las plantas como la
resistencia a enfermedades, el intercambio gaseoso, la germinación de
las semillas y el desarrollo de las raíces.
Muchas de las funciones biológicas son resultado de las
interacciones del NO, o más generalmente, de la familia de compuestos
del óxido nítrico (NOx), con proteínas. Con el objetivo de determinar
dianas que median en los efectos, prestando especial atención a las
proteínas nucleares, se inició el proyecto financiado por la Unión
Europea «NO-dependent protein translocation and S-nitrosylation of
nuclear proteins in Arabidopsis thaliana» (
PRONITROARAB).
Una de las vías más importantes por medio de la que el NO regula
distintas funciones en las plantas es su unión de manera covalente a
residuos de cisteína (S) de otras moléculas, fenómeno conocido como
S-nitrosilación. En primer lugar, los miembros del equipo emplearon
métodos informáticos (el software GPS-SON 1.0, recientemente
desarrollado para predecir sitios de S-nitrosilación) para analizar el
proteoma completo de A. thaliana, constituido por 27 416 proteínas. Los
resultados fueron formidables.
En todos los compartimentos celulares (por ejemplo, en la membrana,
los cloroplastos, etc) se descubrieron proteínas candidatas para la
S-nitrosilación en grandes cantidades. Cuando los investigadores se
centraron en los candidatos más factibles (es decir, con una
probabilidad estadística más robusta) el equipo identificó 3 190 lugares
de S-nitrosilación en un total de 3 005 proteínas diana, principalmente
en los cloroplastos, el compartimento intracelular y en los
plasmodesmos. Estas representaban entre el 5 y el 17 % del contenido
total de proteínas por compartimento.
Posteriormente, los investigadores analizaron más detenidamente la
S-nitrosilación de proteínas nucleares in-vivo. Para encontrar proteínas
nucleares S-nitrosiladas que están relacionadas con el mecanismo de
defensa de la planta, los investigadores expusieron a A. thaliana a un
patógeno. Este pequeña planta con flores es un sistema modelo muy
empleado en biología vegetal.
Posteriormente, se extrajeron del núcleo las proteínas y éstas
fueron sometidas a la técnica de «cambio de biotina» («biotin switch
assay») para identificar las proteínas nucleares S-nitrosiladas. Como
control se emplearon extractos nucleares expuestos a un donante de NO.
De los 195 candidatos identificados, el 57 % (111) eran proteínas
nucleares. Estas proteínas desempeñan un sinfín de funciones,
demostrando la gran importancia de la ruta del NO en la regulación.
La comprensión de los mecanismos de regulación en plantas es
importante a diferentes niveles; desde la adquisición de conocimiento
fundamental hasta para el desarrollo de aplicaciones relacionadas con el
crecimiento o la resistencia a enfermedades en cultivos y para desvelar
rutas parecidas en otros sistemas. Los resultados del proyecto
PRONITROARAB proporcionaron nuevos conocimientos al área de
investigación de la regulación vegetal mediada por la S-nitrosilación de
proteínas y abrió el camino a un gran número de experimentos y a una
prometedora línea de investigación basada en el estudio de estos
fenómenos.