
La conservación de los ecosistemas y de la biodiversidad que albergan podría reducir la aparición de enfermedades infecciosas en estos sistemas naturales. La tasa actual de pérdida de biodiversidad en todo el mundo podría tener consecuencias graves en lo que concierne a la aparición de enfermedades infecciosas.

Por medio de un ciclo de los residuos respetuoso con el medio ambiente, unos investigadores europeos están desarrollando, a partir de residuos urbanos, compuestos que eliminan contaminantes presentes en otros residuos.

Se prevé que el cambio climático incrementará la vulnerabilidad de los ecosistemas forestales ante patógenos y plagas alóctonas invasoras. Científicos de la Unión Europea investigaron maneras de contrarrestar esta amenaza con el propósito de prevenir un descenso de la producción primaria y, en consecuencia, del rendimiento, así como la disminución de las especies arbóreas vulnerables.

Un proyecto de investigación de la Unión Europea se ha propuesto mejorar los modelos comparativos de tecnologías energéticas contaminantes y no contaminantes, así como los modelos sobre la práctica de inversión, a fin de predecir cómo afectarán las distintas políticas al cambio climático.

La extinción de especies de flora y fauna puede generar efectos devastadores en el medio ambiente y en los humanos. Un proyecto financiado con fondos comunitarios está explorando métodos para conservar la biodiversidad en áreas donde las especies se encuentran amenazadas.

La masa oceánica ocupa más de dos terceras partes de la superficie terrestre. Un grupo de científicos recibió financiación de la Unión Europea para preparar el camino para la creación de una red europea de observatorios de las profundidades marinas con el fin de facilitar la vigilancia en tiempo real de la infinidad de cambios que allí se producen y afectan a nuestras vidas.

Un grupo de científicos financiado con fondos de la Unión Europea ha desarrollado con éxito un sistema que genera electricidad a partir de calor residual de baja temperatura (de 60 a 120 °C). El aprovechamiento del calor de baja energía debería contribuir a mitigar de manera significativa los efectos negativos de las plantas industriales sobre el medio ambiente.

A pesar de que el aluminio es un material muy versátil y sostenible, algunos de los subproductos del reciclado pueden ser perjudiciales para el medio ambiente. Se ha puesto en marcha un proyecto financiado por la Unión Europea a fin de desarrollar una tecnología de reciclado in situ de los subproductos del aluminio residuales, económica e inocua para el medio ambiente.

Un proyecto de la UE se encuentra desarrollando, evaluando y compartiendo innovaciones para una vida urbana sostenible. Entre los logros del equipo encargado de esta iniciativa se cuentan la creación de diversas herramientas de planificación, la documentación de casos prácticos que incluyen experimentos en espacios verdes urbanos y la definición de mecanismos para la gestión adaptativa.

Una serie de investigadores están llevando la eficiencia respecto de los recursos a un nuevo nivel gracias a la capacidad de convertir el abono de origen animal en diversos materiales de utilidad para las industrias agrícola y hortícola.

Investigadores europeos están desarrollando un novedoso método para la conservación marina a nivel internacional que combina la creación de redes de zonas protegidas y la capacidad de producir energía.

Una iniciativa financiada con fondos comunitarios ha desarrollado diversas mejoras para modelos del sistema terrestre (MST) a fin de proporcionar previsiones más fiables del clima futuro.

Las plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR) deben manejar grandes cantidades de datos de diferentes fuentes y de variada calidad, lo que hace difícil para los operadores identificar el estado de cada planta. Una iniciativa de la UE abordó este problema haciendo posible manejar con eficacia todos los datos disponibles.

La aviación es cada vez más ecológica gracias a una nueva herramienta de software que ayuda a mejorar el rendimiento de las aeronaves durante cada fase del ciclo de vida, desde la construcción hasta el fin de su vida útil, pasando por las operaciones.

El deterioro de los edificios históricos es una inquietud cada vez más urgente y es por ello que también es necesaria una gestión más sostenible del patrimonio construido. Gracias a una iniciativa de la Unión Europea surgen nuevos materiales complejos diseñados específicamente para la restauración de materiales patrimoniales.

¿Bastarán por sí solas las estrategias de reducción de emisiones de las economías mundiales para conseguir que el calentamiento global no supere los 2 grados centígrados?

Un proyecto de la Unión Europea se propone respaldar a los responsables de la elaboración de políticas y la toma de decisiones en lo referente a adoptar medidas bien fundamentadas gracias a facilitar que comprendan las consecuencias de diferentes políticas y regímenes climáticos, reduciendo así sus dudas e incrementando su conocimiento al respecto. Hasta la fecha, la labor se ha consagrado a identificar las necesidades de conocimiento y a generarlo a través de recabar y sintetizar información.

Una serie de investigadores se plantean reducir los efectos de los desastres naturales y los peligros meteorológicos inducidos por el cambio climático mediante una mejora en los medios dirigidos al intercambio de conocimientos entre expertos de este sector.

Científicos financiados con fondos europeos crearon tecnologías destinadas a la captura, transporte y almacenamiento de dióxido de carbono (CO2) en formaciones rocosas profundas, una labor que puede contribuir a mitigar el cambio climático.

Un proyecto financiado por la UE llamado PAGE21 tiene el objetivo de comprender las interacciones entre el sistema climático global y el suelo congelado. Su equipo responsable cuantifica el deshielo del permafrost, mide las emisiones de carbono y nitrógeno desde las zonas de permafrost e investiga los efectos de las emisiones sobre el cambio climático.

El calentamiento global puede tener un efecto de gran alcance en Europa y en el resto del planeta. Una iniciativa financiada por la UE está identificando y cuantificando los efectos de un entorno cambiante y las mejores prácticas para hacerles frente.

Auspiciados por un proyecto financiado por la UE, un equipo de investigadores está trabajando en hallar métodos para almacenar residuos nucleares bajo tierra y sellarlos con obturadores especializados. Si el proyecto tiene éxito, los primeros repositorios geológicos permanentes podrían operar en Europa a partir del año 2025.

A pesar de su belleza y biodiversidad, los arrecifes de coral son ecosistemas frágiles que están bajo una amenaza creciente debido a las actividades humanas y al cambio climático. Por ello, investigadores de la UE están ayudando a reforzar la capacidad de los países del Caribe para preservar y proteger sus arrecifes.

El ámbito de la depuración de agua podría verse revolucionado por una planta energéticamente autosuficiente de tratamiento de aguas residuales procedentes del sector de los lácteos.

En un intento de transformar a Europa en una economía ecológica, varias partes implicadas han creado indicadores de progreso. A fin de facilitar esta transición, los artífices de una iniciativa comunitaria estudian instrumentos de evaluación del crecimiento verde y el desarrollo sostenible.