Aunque los bosques son sistemas dinámicos, actualmente están sometidos a una velocidad de cambio sin precedentes. Esto es debido a factores como el cambio climático, la deposición de nitrógeno, la introducción de especies exóticas y la pérdida de biodiversidad y de hábitats.
Hoy día, la capacidad para predecir las consecuencias de todos estos cambios es muy limitada, ya que la respuesta de los bosques a estos fenómenos es resultado de complejas interacciones entre todos los individuos y todas las especies. Debido al ingente número de especies forestales y a su gran diversidad en la Tierra, comprender exactamente cómo responde cada una de ellas a factores abióticos y cómo interactúan entre sí es una tarea realmente desalentadora.
Una posible solución es emplear caracteres funcionales para describir la diversidad; estos ayudan a definir especies en función de su papel ecológico, es decir, cómo las especies interactúan tanto con el medio ambiente como con otras especies. Esto permite clasificar a las especies de acuerdo a sus estrategias ecológicas, de forma muy parecida a como se clasifican los elementos químicos en la tabla periódica.
Teniendo todo esto en cuenta, los investigadores del proyecto «Tree demography, functional traits and climate change» (DEMO-TRAITS) están recolectando datos forestales para descubrir cómo ciertos caracteres determinan las interacciones competitivas y las respuestas al clima de especies forestales. La base de datos abarca los principales hábitats forestales, desde los bosques boreales a los bosques tropicales húmedos, e incluye datos de más de dos mil quinientas especies y de siete millones de árboles.
Los socios del proyecto están analizando cómo la densidad de competidores y las condiciones climáticas afectan al crecimiento y la supervivencia de los árboles. Su singular método reduce el tamaño del modelo informático por medio de la estimación de cómo los parámetros de las especies se relacionan con los caracteres funcionales tanto del árbol bajo estudio como de sus competidores.
Los investigadores descubrieron que los caracteres funcionales determinan en parte la tolerancia a la competición y el impacto de los competidores en cada árbol. Además, los valores de los caracteres que favorecen la tolerancia a la competición motivan que una especie crezca más despacio si no se produce competencia. Por tanto, los resultados del proyecto DEMO-TRAITS han mostrado que los caracteres funcionales pueden ser empleados para predecir a gran escala las interacciones competitivas en los bosques.
Actualmente, se están realizando análisis adicionales centrados en cómo los caracteres funcionales determinan las respuestas de las especies a condiciones de estrés climático y si existe un compromiso entre la tolerancia de las especies al estrés climático y su capacidad competitiva. Esta información será empleada para desarrollar simulaciones a nivel de individuo que pueden predecir las dinámicas de un bosque en términos de su composición funcional.
El trabajo llevado a cabo por los investigadores del proyecto DEMO-TRIATS ayudará a predecir tanto los efectos del cambio climático en los ecosistemas forestales como el papel de la diversidad funcional en la productividad forestal. Esta información será de gran valor para los gestores de los recursos forestales y los responsables políticos.
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